-||-en algun planeta no muy alejado a eden-||-
Había sido una gran noche había bebido hasta mas no poder además de comer una buena carne agridulce con suave picor al masticarla era un sabor sublime y relajante a la ves aunque el ron al parecer me pase con el ron ya que este día si el día anterior había despertado en medio de la nada sobre el capo de un vehículo todo-terreno, este perteneciente a la milicia.
No me desperté o había despertado por mí mismo más bien me había despertado por que una ave me estaba picoteando la lengua  por lo que asustado le di un manotazo a aquella ave para despertarme, algo aturdido solo divise una mancha negra que se estaba alejando más vino a mí un fuerte dolor de cabeza por lo que agarrándome la cabeza perdí el equilibrio  cayendo al suelo por dicha acción más lo peor no terminaba había caído a un cactos pinchándome con sus espinas

-haaaa como duelen estas mierdas, por la p.. que me.. re… pa… como duele-

gritaba como demente en medio del desértico paramo, mientras estas seguían clavadas cuan clavos en una tabla cubriendo casi todo mi vientre,  por lo que tuve que sacarme la polera que llevaba para luego sacarme las espinas una por una en una agonizante y fatua agonía.
ya casi cuando estaba por terminar logre divisar una nave quizás me estaban buscando aunque para mi pensar no era o soy lo suficientemente importante para eso por lo que pensé rápidamente que sería por alguna otra cosa quizás una batalla pero el sonido se escuchaba algo distante por lo que tomando mi arma una ametralladora gauss ligera, no pesaba mucho pero si tenía una buena cantidad de munición además de ser ligera aunque no era como el arma pesada de los marines comunes si tenía  el poder de perforar al menos medio centímetro de armadura, esta estaba guardada a bordo del vehículo en la parte detrás del conductor además de unas granadas y quizás alguna bengala.  Partí a explorar en búsqueda del origen de dichoso ruido aunque era bastante molesto por que la resaca aún no había acabado
Tras llegar al campo de batalla miraba como unas máquinas tácticas se batían en un duelo cosa que le pareció algo peligroso, salir así con un poco de munición ligera algo de C-4 y un machete podrían con tan poderosas maquinas solo me restaba a mirar con los binoculares esperando que no lo detectasen mas era cuestión de tiempo que eso sucediera ya que la ligera hierva alta no cubriría todo su cuerpo empezaba a apestar por el sudor, calor y aromas de una noche de fiesta, y peor aún seguía con la resaca

-Mierda donde vine a parar carajo.-

Grite ahogado con los dientes lo más apretados que podría, y así evitar ser oído por los que parecían ser enemigos en disputa.