Desde la segunda vez que me encontré con Queen en aquel laboratorio, mi investigación se ha redirigido un poco, hacia la investigación de la psique en especies diferentes a la humana. Esta línea de investigación me llevó a tomar una oportunidad de exploración espacial, para la cual se me fue asignada una especie de guardaespaldas contra mi voluntad, seguramente un pedido de mi padre que nunca deja de molestar, ni de vigilarme desde donde quiera que esté.
La persona a cargo de mi seguridad es una mujer, en apariencia experimentada en el combate y con experiencia en el campo del espacio también, una semana de convivencia en la nave mientras que surcaba el espacio tomando muestras de criaturas inteligentes que encontraba por ahí nos llevó finalmente a una parte ligeramente inexplorada del cosmos, donde recibimos un mensaje de SOS proveniente de la que sería, para mi mayor sorpresa, la nave que piloteaba Queen, la cual por suerte logramos rescatar, siendo ella la única tripulante, por lo menos sobreviviente de la nave.
Por supuesto, tengo conocimientos sobre medicina de especies humanoides, por lo cual pude fácilmente poner en forma a Queen con ayuda del ala médica de nuestra nave, pero el misterio continuaba, ¿por qué estaba sola, y a la deriva en su nave? ¿Qué había sucedido? Estaba dispuesta a hacerle un interrogatorio completo, cuando repentinamente algo en la nave parece haberse averiado, la nave se movía sola, sin ningún control, y a la vez con una trayectoria misteriosamente controlada, dirigiéndonos hacia un planeta desconocido de tonalidades rojizas desde afuera.
No importaba cuanto intentara mi “guardaespaldas” mover la nave, esta nunca hizo caso, y al momento del aterrizaje, esta simplemente descendió nuevamente, de manera controlada, para finalmente dejar de responder por completo. La nave no se movería más, y mi guardaespaldas de nombre Ellie lo sabía bien, de forma que sugirió sin demora prepararnos para salir a la superficie. Un análisis rápido de los sensores de la nave me entrega el resultado de una atmósfera respirable, pero con alto contenido de material particulado, casi como las ciudades más concurridas de viejos planetas, que aunque a corto plazo no era dañina, a largo plazo podría provocar varias enfermedades respiratorias, eso no sería mi destino.
- Ahhh… Entiendo, entonces tan solo necesito mi portafolio, y algunos objetos importantes, Queen, posiblemente tu estés bien por tu cuenta pero, recomiendo que lleves algo para cubrir tu boca, ¿no querrás tener los pulmones de un maldito fumador en el futuro verdad?...-
Al decirle esto a la mercenaria, me dirijo hacia mi habitación, y tomo mi portafolio especial del suelo, también cargo un morral de supervivencia con suficiente espacio para meter la mitad de los medicamentos del ala médica, así como un kit básico de supervivencia, realmente no pensaba que fuera a necesitar todo esto, pero un leve pero molesto ruido ha estado sonando en mi cabeza desde que aterrizamos, y no me pienso confiar demasiado con nada de este maldito lugar.
- Ya estoy lista, ah, y tal vez me sirva de algo llevar un par de armas, veamos, me quedo con este rifle, y un par de pistolas.-
Mi morral en mi espalda cargando por supuesto munición extra de las armas que llevaría, las dos pistolas aseguradas con un cinturón especial para ellas ajustado a mi bata, mi portafolios en mano y el rifle apoyándose en mi hombro son el equipo completo que llevo al momento de abrir la compuerta de la nave y adentrarnos en lo desconocido. Mientras que estoy bajando por la rampa de descenso, escucho a Ellie indicándonos que nos dirigiremos al norte donde parece que hay unas instalaciones, pero justo después de escucharle hablar, una voz completamente diferente y más inquietante resuena dentro de mi cabeza, un leve escalofrío pasa por mi columna, y con cautela miro de un lado al otro.
- Maldita sea, no llevo ni una hora en este podrido planeta y ya me quiero ir… ¿qué condenado karma estaré pagando para estar en este asqueroso lugar?...-
Al igual que de forma pasiva bloqueo los rayos UV, desde que salgo empiezo a reflectar también las partículas de polución del aire, mientras que no tenga que hacer mucha más actividad con mi poder, esto no me provocaría presión innecesaria en mi cabeza, pero en mi mente solo podía pensar en que lo mejor sería no tener que usar nada de lo que llevo conmigo al final del día…